Washington se desayunó este domingo con algunos detalles sobre la gestación y el lanzamiento la noche anterior de bombardeos sobre tres instalaciones nucleares en Irán, pero aún inmersa en un océano de incertidumbres acerca de lo que condujo a ese ataque sin precedentes y, más importante, sobre las imprevisibles consecuencias que puede tener la súbita conversión militarista de Donald Trump.